Puedo describir MCCB como un trocito del cielo, donde estas
alejada del mundo y de todas las cosas que en él están, además estas rodeada de
hermanos que tienen el mismo sentir que tu, y es que allí todos amamos al Señor
y deseamos servirle. Para mí es muy especial.
El tema de este campamento ha sido preciosas y grandísimas
promesas. Hemos visto muchas promesas que el Señor nos hace, como por ejemplo,
la promesa de la vida eterna, la promesa de la presencia de Dios, la promesa de
soportar la tentación, la promesa de guardar nuestros hijos, la promesa de
provisión, la promesa de la segunda venida y la promesa de tranquilidad. Y lo
mejor es que cada una de estas promesas se van a cumplir o ya se están
cumpliendo. Gloria a Dios.
Personalmente, me han gustado todas la predicaciones,
estudios y devocionales. Pero en especial me tocó y me gustó mucho la promesa
de soportar la tentación que fue predicada por el Hno.Guillermo Williams. El Señor tocó mi corazón y fue ahí cuando tomé
la decisión de que él sea el que controle mi vida, mis pruebas, problemas,
tentaciones, etc. Y sobre todo a depositarle toda mi confianza. Él nos manda
que le dejemos todas nuestras cargas, todas aquellas cosas que pueden ser de
estorbo para seguir creciendo en nuestra vida cristiana, y así descansar en él. Al hacer eso sentí mucha paz dentro de mí,
fue algo increíble y emocionante.
También tengo que destacar la compañía y la unión con las
jóvenes de mí iglesia. Este año no había tanta juventud como el pasado. Pero
eso ha hecho que nos unamos más, y que
las pueda ver como mis verdaderas amigas, que sé que siempre van a estar ahí.
Aquí incluyo también a las chicas que no
pudieron ir. Además, disfrutamos mucho juntas, compartiendo cosas, riéndonos,
etc. Nos pudimos conocer un poco más.
En conclusión, este campamento como el anterior ha sido de
bendición.
Gracias a Dios.
Jennifer J.
Jennifer J.
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